lunes, 24 de agosto de 2009

El Silencio...

Ahí estaba, una vez más sentada frente al computador, viendo como el tiempo pasaba a mi alrededor, apenas podía percibirlo, en ese momento no tenia conciencia de ello...

Decidí quedarme en paz, quieta, inmóvil... El silencio del cuarto era escalofriante, tan intenso y puro que podía oír hasta el más mínimo detalle con toda claridad. Era ese mismo silencio que a muchas personas aterra, pero que a mi, extrañamente me agrada. No tengo muy claro el "Por qué" pero el silencio me atrae, me busca y me invita a reflexionar... Mi atención se vuela de la tierra y se centra en otro lugar, en otro planeta, en otro Universo. Me lleva a las nubes y luego, ante el más mínimo sonido, me suelta... Y me deja caer nuevamente a la realidad.


No estoy segura como tolero aquellos cambios tan drásticos... Pero ya me acostumbré, asumí que así es la vida, Como un sube y baja... Algunas veces estaremos arriba y, en un abrir y cerrar de ojos, Abajo...




Los invito a contemplar la belleza de lo Inexistente... El silencio.

domingo, 23 de agosto de 2009

Habité el Paraíso


Es algo difícil de creer, lo sé y estoy consciente de ello... No es parte de mi imaginación, es la verdad, yo habité el paraíso, ¿Y qué recuerdo de el?...

Recuerdo el calor, esa tibieza que fácilmente me envolvía y me invitaba a permanecer en el por un largo tiempo, en el que perdía completamente la noción de lo que a mi alrededor pasaba. Recuerdo también esa sensación de seguridad que me invadía día a día. Recuerdo los colores, los olores, las formas, las texturas, los estilos, extrañamente recuerdo todo... Recuerdo incluso mis propios recuerdos, también recuerdo que soñaba... Es extraño pues el paraíso para muchos es una simple utopía, pero para mi el paraíso era un sueño y yo, dentro de él, también soñaba...

Recuerdo movimiento, el paraíso se movía junto a mi. Ondulaba a mi alrededor, seguía mis pasos, mi ritmo, seguía incluso mi respiración y mis pensamientos... Yo podía caminar, sí caminar con mi cabeza, con mis dedos, con mi espalda... En realidad no sabía si caminaba, me arrastraba o simplemente trepaba...

No habían referentes, nada que me dijera si yo subía o bajaba, si salía o entraba, si iba o venía... Me sentía libre y plena, era tan malditamente feliz... Supongo que así es el paraíso, lamentablemente de la noche a la mañana desapareció, no me dijo adonde iba ni cuando regresaría...

Simplemente se fué sin decirme adiós...

sábado, 22 de agosto de 2009

…sèveR lA


Desde que lo ví pasar aquella vez no lo pude jamás olvidar… cada año del mes pienso en él, a veces siento que eso me vuelve loca. No hay ni un solo mes del día en el que él no esté en mi cabeza, porque en cada hora hay muchos días y en cada minuto muchas horas. Si sigo pensando en él así, para cuando lo vea otra vez ya seré vieja…

Quizás sea mejor contar el tiempo al revés…